Transición a una Economía Verde
La economía global de hoy crece a un ritmo rápido, gracias a la industrialización, la urbanización y el aumento de la población. Sin embargo, este crecimiento ha tenido un alto costo para el medio ambiente y la salud de las personas. La explotación intensa de recursos naturales, tanto renovables como no renovables, ha provocado la escasez de recursos y ha generado crisis ambientales graves, como la pérdida de biodiversidad, el cambio climático y la contaminación. (World Bank, 2021).
La creciente demanda de recursos ha llevado a una explotación incontrolada, dañando la capacidad de la Tierra para regenerar estos recursos. La pérdida de biodiversidad es especialmente preocupante; muchas especies están desapareciendo a un ritmo alarmante, lo que afecta no solo a los ecosistemas, sino también a servicios vitales como la polinización y la purificación del agua. (IPCC, 2022).
El cambio climático es otro efecto directo de la actividad económica actual. Las emisiones de gases de efecto invernadero, principalmente de la quema de combustibles fósiles, han provocado un calentamiento global que afecta a todo el planeta. Esto no solo amenaza a los ecosistemas, sino que también impacta la salud humana, aumentando enfermedades respiratorias y cardiovasculares por la contaminación del aire (Stern, 2007).
La conexión entre la economía y la salud de las personas es clara. La explotación excesiva de recursos y la degradación del medio ambiente afectan directamente el bienestar físico y psicológico. La escasez de agua y alimentos, resultado de prácticas agrícolas insostenibles, puede provocar inseguridad alimentaria y conflictos, generando estrés y ansiedad en las comunidades (ECLAC, 2021).
Además, la preocupación por la crisis ambiental puede llevar a lo que se conoce como ecoansiedad, un estado de angustia relacionado con el futuro del planeta. Esta ansiedad puede afectar la calidad de vida y las relaciones de las personas (Pearce, 1989). La economía, al enfocarse en el crecimiento a corto plazo, ignora estas preocupaciones, perpetuando un ciclo de daño.
Ante estos retos, es urgente transitar hacia una economía verde. Este enfoque busca equilibrar el desarrollo económico con la protección del medio ambiente y el bienestar social, promoviendo tecnologías limpias y prácticas sostenibles (UNEP, 2011). En una economía verde, el crecimiento no se mide sólo en términos monetarios, sino en el bienestar de la población y la salud del planeta.
Los principios de la economía ambiental y ecológica son esenciales para este cambio. Adoptar políticas que promuevan el uso eficiente de recursos, reduzcan las emisiones de gases de efecto invernadero y conserven la biodiversidad son pasos necesarios para lograr un desarrollo sostenible. Ejemplos incluyen prácticas agrícolas sostenibles, inversión en energías renovables y promoción de la economía circular (Costanza, 1997).
La economía actual, caracterizada por la explotación intensa de recursos, ha tenido un impacto negativo tanto en el medio ambiente como en la salud de las personas. Es urgente cambiar hacia una economía verde y sostenible; este cambio no solo es clave para enfrentar el cambio climático y preservar la biodiversidad, sino también para asegurar el bienestar físico y psicológico de las generaciones presentes y futuras. Adoptar un enfoque que equilibre el desarrollo económico con la protección del medio ambiente es un deber que debemos abordar juntos. La salud del planeta y de sus habitantes depende de ello.
Referencia
Costanza, R., d'Arge, R., de Groot, R., Farber, S., Grasso, M., Hannon, B., ... & Belt, M. van den (1997). The value of the world's ecosystem services and natural capital. Nature, 387(6630), 253-260.
ECLAC. (2021). The economic impact of resource exploitation in Latin America. Economic Commission for Latin America and the Caribbean.
IPCC. (2022). Climate Change 2022: Impacts, Adaptation, and Vulnerability. Intergovernmental Panel on Climate Change.
Pearce, D., Markandya, A, y Barbier, E. (1989). Blueprint for a Green Economy. Earthscan Publications Ltd.
Stern, N. (2007). The Economics of Climate Change: The Stern Review. Cambridge University Press.
UN. (2019). Sustainable Development Goals Report 2019. United Nations.
UNEP. (2011). Towards a Green Economy: Pathways to Sustainable Development and Poverty Eradication. United Nations Environment Programme.
World Bank. (2021). Global Economic Prospects. The World Bank.
La economía y el pensamiento en general de las personas usualmente cambia al pasar por una situación compleja o desafiante. Actualmente aquella situación es el cambio climático y todo lo que produce este desafío, si bien es cierto que no podemos cambiar de la noche a la mañana, el cambio es posible, existe una brecha pequeña que cada día se cierra mas, esa brecha es la posibilidad del cambio, aún es posible, la eco-ansiedad aunque nos afecta constante mente (esto en su mayoría a las nuevas generaciones) no podemos dejar que nos limite. La humanidad solo cambiara cuando se encuentre en el borde del abismo, cuando se encuentre frente a frente a su propia muerte.
ResponderBorrarcomo se dijo anteriormente en el texto, la economía actual se caracteriza por la explotación masiva de los recursos, mayormente lo que causa mayor contaminación en el planeta, son las grandes empresas, que gastan o contaminan a gran escala el ecosistema, desde ya se debería estar potenciando una economía mas verde, ¿por que?, simplemente por que nuestro planeta depende de ello, de nosotros depende que nuestros planeta y nosotros como seres vivos sigamos existiendo, o que sigamos teniendo una calidad de vida mayor, al final a la mayoría de empresas les interesa ganar dinero sin importar que, y eso nos esta afectando, y por supuesto esto no esta bien, y por nuestro bien como especie, no debemos seguirlo haciendo, y una economía verde es la mejor salida.
ResponderBorrar