La industria alimentaria y su relación con la obesidad

 Luis Enrique Macias Tovar

No es mentira la idea de que la humanidad está sufriendo problemas de salud por el sobrepeso, enfermedades que se originan debido a un aumento de peso gracias a la mala alimentación que se consume hoy en día y la falta de ejercicio, pero, ¿Quién tienen la culpa de este desorden alimenticio? ¿Por qué si hay una supuesta solución para esto, se les hace muy difícil superarlo a los que la poseen? ¿Es la falta de fuerza voluntad? esto y más hablaremos en el siguiente ensayo.

Muchos piensan que la solución para el sobrepeso y los problemas de salud por la obesidad es tan simple como hacer ejercicio. Si, el ejercicio puede ser fundamental para un buen estado de salud, pero no es la solución definitiva, de que sirve moverse, ser activo, caminar largas distancias si volvemos a consumir comidas no sanas, procesadas y adictivas.

Claro hacer ejercicio te ayuda a bajar de peso, comer menos ayuda a bajar de peso, pero no tienen en cuenta su alimentación algo que las industrias han generalizado con comerciales, propagandas y campañas que fortalece esa idea de ‘’moverse más ‘’ que la de ‘’comer menos comida chatarra ‘’ dado que a ellos les beneficia más que sigan consumiendo.

El comercial de Coca Cola Be OK (Para estar bien) de 2013 es un ejemplo de cómo han influido en ese pensamiento de que para estar bien hay que moverse, no importa que comas o tomes esas ‘’calorías de felicidad ‘’ la puedes reemplazar fácilmente con sacar a pasear al perro, reírse o bailar tu canción favorita. [The Coca-Cola Co,] (16 de enero 2013) Be OK (Be OK).

Entonces si la culpa no es la falta de fuerza de voluntad de uno ¿A quién debemos de culpar por este problema?

En los años 70 en estados unidos sus ciudadanos empezaban a sufrir problemas cardiovasculares causando muchas muertes debido al alto consumo de alimentos con elevados niveles de grasa, por lo que el comité especial del senado de nutrición decidió intervenir obligando a cambiar estos hábitos de comida  donde expresaban el consumir productos grasos y en consumir más alimentos sin grasa *Como los panes y cereales* por lo que recomendaban a la gente consumir más esos alimentos  ya que para ellos eran ‘’fitness ‘’ porque no poseían altos niveles de grasa.

 Las industrias alimentarias tenían que reemplazar la grasa y qué mejor manera que el azúcar, por lo que inundan los supermercados de comidas light con alto niveles de azúcar y procesados, provocando un consumo de azúcar altísimo, por ende, el aumento de casos de diabetes tipo II se disparó.

Estos alimentos procesados y azucarados no son buenos para nuestro cuerpo, muchos nutrientes que el cuerpo necesita no está en esos alimentos, y el aumento del azúcar en el cuerpo provoca una liberación de insulina alta de lo normal (la insulina ayuda a controlar el nivel de azúcar en el cuerpo, convirtiendo al azúcar que no se necesita en grasa) que con el tiempo el hígado deja de producir esta insulina provocando una enfermedad famosa llamada diabetes tipo ll.

¿Qué es lo que impulsa esta epidemia de obesidad? Las ganancias corporativas. Es más rentable vender comidas chatarra que las sanas además uno de los mayores consumidores de comida chatarra es de la gente con recursos bajos ya que es barata y se pueden satisfacer. La manipulación que tienen los comerciales hacia el consumidor: Poniendo caricaturas o personajes ficticios, creando ilustraciones del producto no consumible (falso) para que se vean de alguna manera más bonita y llamativa para el consumidor.

Una de las principales víctimas de esta hazaña de marketing son los niños, desde chicos se rodean de una contaminación publicitaria y crean ideas que normalizan el consumo de azúcar como algo divertido. Se han hecho campañas en contra de esto, obligando a las empresas a quitar los dibujos animados en los cereales, ponqués, yogurts etc... Algunos se opusieron de esto debido a una creación de símbolo que se genera desde la infancia de los niños que veían a un personaje caricaturesco promocionando un alimento no saludable y adictivo.

En otras partes del mundo impusieron un aumento de impuesto a las industrias alimentarias y de una ley para que pongan un sello o logo que a simple vista les permita saber al consumidor si dichos productos tienen altas grasas, muchos azúcares, altas calorías. Obviamente no les favoreció a las corporaciones tachando al estado de discriminadores y controladores del consumo ajeno. Empero, tuvo una reducción del consumo y de una nueva reformulación de los productos con menos azúcares, menos calorías y menos grasas

Estamos en un problema de salud mundial de la obesidad apoyada por un grupo de corporaciones de la industria alimentaria con la excusa de una obtención de ganancia a través de la venta de alimentos dañinos para la sociedad, un enfrentamiento entre la libertad corporativa y la protección al consumidor, ¿quién tiene la razón? ¿Las ganancias de las corporaciones gigantescas o del derecho a la salud de los consumidores? Sale más barato seguir apoyando y consumiendo de una industria que fomenta la obesidad, problemas de salud costosos e enfermedades crónicas para el propio consumidor o de una vida plena de salud sin sufrimiento y dolor provocados por una mala alimentación gracias a un interés corporativo que impulsa al consumo de la comida chatarra, neguemos a obedecer.